Y después de la Grecia clásica, toca esqueletizar el renacimiento: La Gioconda. Aunque como podréis ver me he tomado bastantes libertades en esta versión: Un libro en lugar del brazo del sillón, el color de la ropa el fondo...
Y la he instalado en el interior de esta caja de madera que he tuneado y pintado en negro y bronce.
Sin ánimo de compararme con el gran maestro Leonardo, creo que el resultado es bastante satisfactorio .
se le ha congelado una chispa la sonrisa o es mi sensación...? debe ser el frío de Burgos ...
ResponderEliminarRepito esta genial. Me ha impresionado. Besos
ResponderEliminarNo, si al final me vas a enganchar a este mundo tan tenebroso, jeje. Un saludo, Eva
ResponderEliminarme encanta ya te lo dije, cada dia te salen mejor los huesos, jajaja, no as pensado en hacer una tienda de los prodigios, como la que sale en la television, seria un punto .
ResponderEliminarun abrazo
Muchísimas gracias por vuestros comenarios, me hace muy feliz ver que os gusta y me anima a seguir por este camino :)
ResponderEliminarContar, te tomo la palabra... Nunca se sabe lo que puede salir de esa idea :D
ahaha!!! No tengo palabras! Nunca me pareció muy agradable la Mona Lisa, porque me parece que Leonardo da Vinci vestido de mujer ... pero su trabajo es muy divertido!
ResponderEliminarbesitos
Caterina
Pues precisamente a mi me parece uno de los cuadros más fascinantes de la historia (quizá por esa posibilidad de que sea un autorretrato del propio Leonardo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras y tu visita, Caterina :)
¡¡se ha quedado en los huesos!!, me encanta!!!!!,es lo que he pensado al ver los dos cuadros juntos jajaja, es un gran trabajo Raquel.
ResponderEliminaresto es lo mas! que imaginacion! fantastica!!!!!
ResponderEliminarDe los que has hecho es el que más me gusta. Me parece genial.
ResponderEliminarBesujis!
También es mi favorita, Virginia :D
ResponderEliminartrès original
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