Como siempre, hubo regalitos:
Mati nos obsequió un mapundi impreso en tela pensando en la casa del mago, y un frasco hecho con abalorios que también tendrá su sitio en una escena.
Nosotros le regalamos un Pinocho hecho por Kike y dos cuadritos de punto de cruz.
Fué un estupendo reencuentro que esperamos volver a repetir pronto.
2 comentarios:
qué bien que pudisteis quedar, y que preciosos regalos! me alegra que disfrutáseis tanto...besos
Me encanta tu blog y, más aún sabiendo que eres burgalesa, ciudad que me ha adoptado 4 años para completar mis estudios.
Un saludo.
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